Noticia Publicada - Diario Jaen
Diversión preparada con mucha harina y buen aceite
Las 'gachamigas', además de un plato típico de la sierra, es un atractivo turístico más de Cazorla. El concurso para la elaboración de esta comida tradicional atrae a visitantes y participantes que disfrutan de una agradable jornada.
La Plaza de Santa María acogió la segunda edición del concurso “La Gachamiga de la Abuela”. La cita gastronómica, que arrancó el año pasado con gran aceptación, está organizada por Manuel Bello, gerente de la casa y tienda rural “La Alacena de la Abuela”. La Asociación Provincial “Jaén Bloguero” se sumó también a la iniciativa cultural. La idea es ofrecer una actividad alternativa que potencie los atractivos turísticos de la ciudad. Otro de los objetivos es dar a conocer la propuesta a través de internet.
En cuanto a la aceptación del concurso, según la organización, es satisfactoria y, prueba de ello, es la gran cantidad de público asistente. Además, los blogueros también pudieron participar en un concurso.
Este año, el jurado lo tuvo difícil para repartir los premios. Finalmente, le concedió el primero a la Escuela Taller de Guías Turísticos de Peal de Becerro. Los segundos clasificados fueron los miembros del grupo encabezado por José Antonio Martos Iruela e Isabel Peralta. En tercer lugar quedó María de los Ángeles Fernández. Los premios eran un jamón ibérico de bellota y una botella de vino. Para elaborar este plato típico de la sierra, fue necesario consumir más de veinte kilos de harina, un ingrediente fundamental para preparar las gachamigas. Junto a ello, una gran cantidad de aceite. La harina sobrante se empleó en realizar roscos fritos, cuyos cocineros también se llevaron un premio. La organización les reconoció el esfuerzo con un circuito de hidroterapia, para dos personas, por cuenta del Hotel Sierra de Cazorla.
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